lunes, julio 22

< Memorias de una mal sueño: Novedades... >


Viernes, 19 de julio

Hay días en que sueño incesantemente contigo, con tu mano en mi mano...

Hay días ne que te pienso todo el tiempo, y los silencios se llenan de tu nombre.

Hay días en que eres todo lo que veo, hacía donde quiera que mire.

Tardare un poco en desintoxicarme de tí, no importa cuando me esfuerze - en realidad no me esfuerzo para nada - siempre te pienso, te extraño, te quiero...

Quisiera no ser tan cursi, aterrizar un poco más mis pies en el suelo, dejar de flotar al viento, ser flor en vez de nube, ser río en vez de arcoíris.

Todo ha sido por tí, todo este cambio, toda esta evolución, todo esto que en algun momento me trasnformará de nuevo.  
Eres ese engrane, esa pieza que me había faltado.

Te fuiste, pero dejaste tras de tí, una nueva forma de trabajar, de crecer, y de pensar. Ahora la maquinaria de mi corazón puedes trabajar aunque no estes más aquí; haces falta, no lo niego y hay veces en que quisiera regresar a mi antigua forma de trabajar pero...
¿De que valdría tanto esfuerzo en estos años?
¿De que valdrían tantas lágrimas y tantas horas de alegría?

El estilo de vida cambio, y con el, la forma en que se avanza en esta empresa.  La dueña soy yo, la que dice que la vida sigue; el antiguo presidente se fue, yo asumire el mando, y llevare esta empresa por el camino que el antiguo presidente hubiera querido...

Hay días en que la vida se ve tan diferente, en que haces tanta falta...

Hay dias en que simplemente te extraño.


< Memorias de una mal sueño: doble personalidad de héroe >


Martes, 16 de julio

Al final me volviste a salvar...

No fue necesario que nadie viniera, me salvaste lentamente de mi misma, trasnformandome en otra. Hiciste una red de fantasía, tan delgada y a la vez tan fuerte, que el golpe pr la caída tuvo los minimos daños.

Me volviste a salvar, como el día en que me enamore de tí.
Corriste en mi ayuda, actuaste rápido trantando de ayudar.

No puedo hacer más que aprovechar lo que me dejaste, lo que me enseñaste, y seguir, seguir adelante como querías que hiciera.

¿Puedo llevarme la red que hiciste?
¿Puedo utilizarla?
¿Puedo... seguir soñando mientras me recupero de mis heridas?

Lo siento, no es mi intención entristecerte, o hacerte sentir culpa o responsabilidad, no, jamás es esa mi intención.

Fuiste muy bueno para mí mientras duró, mientras nuestro amor germinaba, mientras ambos cuidabamos la tierra.

Será difícil olvidarte, será difícil borrar las palabras que se fueron clavando en mi corazón, no digo que no pueda, pero por ahora, mientras aun estoy convalenciente... no quisiera.

< Memorias de una mal sueño > 1ra parte


Miercoles 10 de julio

No puedo evitar extrañarte...
Y te extraño tanto que me duele el corazón, se estruja de tal forma que a veces imposible detener mis lágrimas.

No he podido borrar el futuro que imagine contigo.

Aun hay ocasiones en que noches como esta se presentan ante mi, haciendo más difícil tu ausencia... las luciérnagas, las tardes lluviosas, las noches estrelladas... cuan feliz hubiera sido teniendote a mi lado.

No reniego de haberte conocido, no reniego de haberte encontrado y luego haberte perdido, quizá ese era el destino que nos tocó a destiempo, algo que no se podía evitar, pero duele, duele como la cicatriz de una operación importante.

No puedo evitar extrañarte, porque dejar de hacerlo sería olvidarte y yo aún no puedo hacer algo así... simplemente te extraño, me duele extrañarte, pero no quiero que nadie venga en mi auxilio.

Quiero estar sola, y quiero extrañarte aún más hasta que esta cicatriz sane y pueda extrañarte sin dolor.